El Instituto Superior de Formación Docente Salomé Ureña, ISFODOSU, celebró el segundo “Encuentro de Directores y Orientadores de centros educativos” organizado por la División de Admisiones del recinto en Santo Domingo, Félix Evaristo Mejía, FEM,
El encuentro fue celebrado en el Auditorio Fuensanta Muñoz donde participaron más de un centenar de representantes de las regionales de educación 10 y 15 de Santo Domingo y 17 de Monte Plata y docentes del ISFODOSU.
El director académico del FEM, Dr. Braulio De los Santos en representación de la vicerrectora ejecutiva del Recinto FEM; Mtra. Glenny Bórquez agradeció a todos por aceptar la invitación para conocer los beneficios que tienen los estudiantes que entran a la Pedagógica Dominicana.
“Los estudiantes de los centros educativos, nutren y le dan sentido a la misión del ISFODOSU cuando llegan a optar por una beca para ser maestros de excelencia”, manifestó el maestro de los Santos.
La conferencia magistral fue ofrecida por la Mtra. Rossely Alcantara, quien habló sobre el proceso que viven los estudiantes que llegan a la institución y explicó el método de los seis sombreros del Dr. Edward de Bono.
“El pensamiento de los seis sombreros para pensar reemplaza el pensamiento contrario con el pensamiento paralelo”, informó Alcántara.
Los sombreros de distintos colores fueron utilizados por la maestra para tratar el tema: “Hacia una transición orientadora. Un análisis desde el pensamiento paralelo.
Según el análisis realizado con los directores y orientadores, realizar una transición orientadora a los bachilleres tiene un impacto positivo cuando llegan a la universidad.
“Los estudiantes que son orientados correctamente tienen una mejor preparación académica, toma de decisiones, prevención de la deserción, adaptación social y emocional, retención y éxito académico, conexiones y redes de apoyo”, expresó la Mtra. Alcántara.
Agregó que durante el proceso de transición encontramos debilidades como la falta de información adecuada y completa sobre las opciones educativas disponibles, falta orientación y asesoramiento individual que identifique las fortalezas, intereses y metas profesionales y la inexistencia de programas y protocolos de transición.
Alcántara propuso que desde los centros educativos se creen programas de orientación vocacional en el bachillerato, que se brinde tutorías y orientaciones personalizadas, programas de apoyo académico, se hable sobre vida universitaria y visitas a universidades, ferias y eventos.
“Una transición orientadora del bachillerato a la universidad es esencial para garantizar el éxito académico y personal de los estudiantes”, explicó la maestra.
Exhortó a los docentes invitados a brindar apoyo y orientación para que los estudiantes tomen decisiones informadas sobre su carrera universitaria, y los preparen para enfrentar los desafíos que encontrarán en la educación superior.
En la actividad también estuvieron presentes autoridades y estudiantes del Recinto FEM.
EC/ MS