Nuestro egresado Víctor Andrés Ventura Cruz realizó una Licenciatura en Educación Física en el Recinto Luis Napoleón Núñez Molina, LNNM, en el municipio Licey al Medio, provincia de Santiago.
Aunque se graduó en 2014, ha continuado capacitándose en el área con las becas de maestrías que ofrece el Instituto Superior de Formación Docente Salomé Ureña, ISFODOSU. La primera en realizar fue Gestión de la Educación Física y el Deporte, la segunda sobre Educación Física Integral y actualmente está cursando la Maestría en Investigación Científica.
Su motivación por ser maestro, surgió desde que era estudiante de bachillerato en el Liceo Nocturno Salvador Cucurullo, provincia Santiago, cuando realizaba sus tareas en la casa de sus amigos y descubrió que era bueno explicando cómo hacerlas. La emoción que sentía al ver que aunque tenía menos edad que sus compañeros, le veían como un líder cuando les enseñaba.
“Me sentía tan feliz de poder lograr a otros comprender sus clases, que decidí realizar mis horas sociales impartiendo docencia de matemáticas”, explicó Víctor.
Llegó al ISFODOSU con 21 años y eligió la Licenciatura en Educación Física porque, de las personas más respetadas de su comunidad, llamados Felipe y Pedro Domínguez, habían fallecido y los vecinos le exhortaron que le sustituyera como profesor de educación física, porque le vieron crecer y convertirse en un joven deportista, que pertenecía a una academia de béisbol.
Gracias a que se destacaba en los deportes, había recibido propuestas de trabajo como maestro de Educación Física, pero necesitaba estudiar y adquirir las herramientas de enseñanza y prácticas docentes que ofrece el ISFODOSU a sus estudiantes.
“Ser docente es una carrera de vocación que tiene el poder de transformar vidas, además de ser una profesión con la que podemos echar a nuestra familia hacia delante”, manifestó Andrés.
Con apenas dos meses en la universidad, se convirtió en padre por primera vez y sumado a esto, esposo. Tener ocho horas de estudios fijas de lunes a viernes, realizar tareas y prácticas, le fue complicado; pero gracias al apoyo de sus dos compañeros más cercanos: Juan José Castillo y Manuel Antonio Rodríguez, pudo terminar, sin rendirse.
“Un buen educador es alguien que enseña con amor, entiende a sus estudiantes y los motiva a aprender y crecer, tanto en lo académico como en lo personal”, afirma Ventura.
Es maestro en el Ministerio de Educación de la República Dominicana, MINERD desde hace 10 años, árbitro de múltiples revistas y en la actualidad escribe un libro sobre estrategias activas para docentes en formación.
Desde el 2012 se ha dedicado a ser maestro investigador y lleva publicados cerca de 11 trabajos de investigación.
Los trabajos de Cruz han sido aprobados dos años consecutivos con los proyectos de investigación: Influencia de Agentes Sociales Sobre la Práctica de Actividad Física y Salud del Alumnado: Un Estudio Comparativo Entre Centros Educativos Públicos y Privados y Las microclases como estrategia para la formación docente de los estudiantes en el programa Licenciatura en Educación Física del recinto LNNM.
Su próxima meta como profesional es realizar un doctorado a través del ISFODOSU.
Me defino como una persona que sé lo que quiero en la vida, reflexivo y crítico de cada una de mis acciones, me gusta promover el crecimiento personal y soy un hombre trabajador incansable”, culmina Víctor.
EC
