“Yo recomiendo a todos los muchachos a que estudien en el ISFODOSU, porque es una buena institución”
Para muchos ella es el alma de la institución. La persona que con su sonrisa cálida y su café aromático teje lazos que unen a la comunidad educativa. Sea trata de la colaboradora del Departamento de Mantenimiento en el recinto del ISFODOSU en San Juan, Urania Montás, Alba Nurys Valdez.
Mujer de corazón humilde y manos laboriosas, nacida en San Juan y criada en la comunidad de Chalona, Alba Nurys conoció el valor del trabajo desde muy joven. Con cinco hijos a su cargo, la vida nunca le fue fácil, pero ella siempre ha enfrentado cada día con determinación y amor.
En sus 12 años de trabajo en el Recinto UM, su labor como conserje no se ha limitado solo a limpiar oficinas y a hacer café, ella sabe que parte de su trabajo es brindar apoyo y alegría a todos los que pasan por la institución.
“Hagan su trabajo bien y sean serios, porque la seriedad vale mucho. Es muy bueno trabajar en una institución y que cuando usted se vaya hablen bien de usted. Hay que ser cariñoso con las personas”, aconseja.
Cuando cumplió apenas meses en su puesto de trabajo, recibió un reconocimiento por su excelente desempeño y su buen comportamiento. Para ella, cada tarea, por más pequeña que sea, es una oportunidad para demostrar su compromiso y su amor por el trabajo.
A pesar de las adversidades, se siente rica en amor y bendiciones porque para ella, “la verdadera riqueza no se mide en dinero, sino en el afecto y la solidaridad de aquellos que la rodean” y en ISFODOSU, dice haber encontrado todo eso y más.
“Cuando mi esposo falleció, ISFODOSU se convirtió en mi refugio y mi segundo hogar, donde encontré no solo un empleo, sino una familia”, expresó con emoción.
Alba Nurys es una promotora de la institución, ha motivado a muchos jóvenes para que estudien educación y se mantengan firmes en sus estudios. La presencia de dos de sus nietos entre los estudiantes del ISFODOSU llena de orgullo su corazón. Verlos crecer y prosperar en el mismo lugar donde ella dedica su tiempo y esfuerzo es una satisfacción indescriptible.
“Yo recomiendo a todos los muchachos a que estudien en el ISFODOSU, porque es una buena institución, porque si se ponen a estudiar, a los 4 años ya son profesionales y salen bien formados y alimentados», aseguró.
Para Alba Nurys Valdez, cada día en ISFODOSU es una oportunidad para demostrar su amor y gratitud hacia la institución que tanto le ha dado. Su compromiso, su dedicación y su espíritu de servicio la han convertido en un pilar fundamental de la comunidad educativa.