Para César y Claudia, padre y madre del recién egresado del recinto de ISFODOSU en Santo Domingo, Eugenio María de Hostos, EMH, es motivo de orgullo ver a su hijo, Argelis Matos Zapete, convertido en un profesional de la educación.
Un joven de actitud tranquila y alegre, con deseos de cumplir las metas trazadas en su vida que inició la mayor apuesta que un estudiante puede tener para su futuro: convertirse en un profesional de calidad. Ese sueño, se forjaba mientras le tocaba trasladarse diariamente desde Villa Mella, de lunes a viernes, para tomar sus clases.
Motivado por algunos docentes, que hoy se han convertido en sus amigos y colegas, Argelis ingresó a las filas estudiantiles de ISFODOSU en el año 2018, para estudiar la Licenciatura en Educación Física.
“Elegí estudiar en ISFODOSU porque los maestros son amables y tienen el interés de compartir todos sus conocimientos”, expresó el egresado.
Asegura que la relación con sus compañeros durante la carrera fue muy buena, porque cosechó amistades y gozó del privilegio de haber tenido maestros respetuosos, amables e inspiradores que lo motivaron a enfrentar el desafío de enseñar en las aulas sin perder el enfoque de hacerlo bien.
“ISFODOSU me facilitó las herramientas necesarias para tener una educación de calidad, con el uso de libros, computadoras y una biblioteca completa para auxiliarme en mis estudios. Pero la experiencia que más disfruté fue tener la oportunidad de representar la institución en los Juegos Universitarios Nacionales como Taekwondista”, cuenta emocionado.
Actualmente, Argelis labora en el Centro de Estudios para la Innovación y el Desarrollo (CEPID), una unidad dependiente de la Universidad Católica de Cuyo Sede San Luis, en Argentina, que funciona como ámbito de formación profesional y de vinculación institucional.
“Para mí, ISFODOSU es una institución íntegra y solidaria con miras a un mejor mañana, que proporciona en sus instalaciones las facilidades para que los estudiantes nos preparemos de la mejor manera. Puedo afirmar que enseñar es una de las cosas más bonitas que podemos hacer, mostremos nuestra mejor sonrisa, llueva, truene o ventee”, concluyó Argenis.
